El tejido se extrae a través del perineo del paciente. Una rejilla (plantilla) permite realizar una biopsia precisa según un patrón predefinido. Las zonas sospechosas previamente identificadas también pueden punzarse con precisión milimétrica. Este procedimiento se realiza bajo anestesia breve. El número de muestras (de 14 a 24 punciones) varía en función del tamaño de la próstata.
Menor riesgo de infección
El riesgo de infección se reduce con una biopsia perineal, ya que el tejido no se extrae a través del perineo y los gérmenes no pueden transferirse desde el intestino. Sin embargo, el riesgo de hemorragia secundaria es ligeramente mayor que con una biopsia a través del intestino.
¿Conveniente para quién?
La biopsia perineal de próstata está especialmente indicada para pacientes con mayor riesgo de infección y con sospecha de tumores en una región de más difícil acceso para la biopsia estándar.