La extirpación radical de la próstata provoca pérdidas permanentes de orina (incontinencia) en un porcentaje significativo de pacientes. Este es, una vez más, el resultado de un análisis de subgrupos del estudio a gran escala ProtecT, que se publicó en la reputada revista European Urology en 2020.
Para ello, científicos de las Universidades de Oxford y Bristol examinaron a más de 2.500 pacientes con cáncer de próstata localizado que, o bien se sometieron a una extirpación radical de la próstata (prostatectomía) o a radioterapia -incluida la braquiterapia (radiación interna)-, o bien fueron sometidos a un seguimiento activo (vigilancia activa). A continuación, se realizó un seguimiento de los hombres durante un periodo de 10 años. Durante este tiempo, los científicos registraron los posibles efectos secundarios de la terapia a determinados intervalos mediante cuestionarios normalizados.
Los resultados del análisis de subgrupos mostraron que los pacientes operados de próstata eran los que más sufrían las consecuencias del tratamiento. La extirpación de la próstata fue lo que más afectó a la capacidad de los hombres para retener la orina: Una quinta parte de los pacientes a los que se extirpó quirúrgicamente la próstata seguían dependiendo de compresas al cabo de tres años, y esto no cambió en los tres años siguientes. En cambio, los pacientes que recibieron radioterapia externa o braquiterapia (radioterapia interna) apenas perdieron la continencia urinaria en comparación con el grupo de control (vigilancia activa).
"Gracias a la irradiación de alta precisión de la próstata en el marco de la braquiterapia, la tasa de incontinencia urinaria de los pacientes se mantiene en un nivel muy bajo incluso años después de finalizar el tratamiento", confirma el Dr. Pedram Derakhshani, urólogo del Centro de Próstata de Alemania Occidental, los resultados actuales. En el proceso se introducen diminutas fuentes de radiación (semillas) directamente en el tumor. Las semillas permanecen allí durante varios meses y administran altas dosis de radiación directamente al tejido tumoral. Esto tiene la ventaja de que el tumor se destruye sin dañar el tejido sano circundante, como la vejiga, el colon o el esfínter.
"La pérdida de calidad de vida como consecuencia de la cirugía es tanto más grave cuanto que muchos hombres con cáncer de próstata siguen sometiéndose a intervenciones quirúrgicas innecesarias", resume el Dr. Derakhshani. La pérdida de la capacidad de retener la orina es uno de los problemas que más temen los pacientes con cáncer de próstata después del tratamiento. Por eso es tan importante informar previamente a los pacientes sobre los efectos secundarios de las distintas opciones terapéuticas, afirma el urólogo de Colonia.
Neal DE, Metcalfe C, Donovan JL et al: Ten-year Mortality, Disease Progression, and Treatment-related Side Effects in Men with Localised Prostate Cancer from the ProtecT Randomised Controlled Trial According to Treatment Received. Eur Urol. 2020 Mar;77(3):320-330.